


¿El tamaño importa?
A ellas les gustaría resolver un sinfín de incógnitas que ellos esconden en su mente como el auténtico tesoro de Los Templarios, lo que resulta imposible. Sin embargo, acercarnos a la ciencia para develar algunos de los misterios más ocultos que ellos guardan en su enorme y pesado cerebro, plagado de testosterona sí es posible.
Si eres mujer sabrás que ellos tienen un nivel de competencia que a veces los aleja de ti, no hablan demasiado, pueden parecer insensibles a tus emociones, tienen el instinto protector muy desarrollado, olvidan con facilidad fechas que son sumamente especiales y pueden permanecer como estatuas durante mucho tiempo, escuchando tus anécdotas. Lo anterior, se debe a las sustancias hormonales y neurotransmisoras que configuran el cerebro masculino a lo largo de su vida, sigue leyendo porque tal vez por fin le des sentido al extraño comportamiento de ellos.

El amor no duele
Las relaciones actuales que se dan entre jóvenes y las nuevas dinámicas de la relación de pareja rayan, en muchas ocasiones, en actitudes alarmantes que pueden convertirse en claras muestras de VIOLENCIA, en una etapa donde el conocimiento de la otra persona debe ser más un juego de niños que comienzan a descubrir el AMOR.

Ellos deben saber que NO es ¡NO!
Sin importar si segundos antes ELLAS dieron alguna información, ELLOS se deberán atener a recibir un NO rotundo si ELLAS cambian de opinión.

Pensemos en SORORIDAD
Como lo dijo, Simone de Beauvoir: “Que nada nos limite. Que nada nos defina. Que nada nos sujete. Que la libertad sea nuestra propia sustancia”.

Por qué ellas hablan más y ellos menos
El cerebro envía mensajes a 360 km/h., jamás deja de funcionar, una parte se dedica a reconocer rostros, se ha descubierto que el alcohol lo incapacita, de ahí que el lenguaje se vea afectado con algunas copas encima; el estrés hace que el cerebro se haga más pequeño y cuando reímos piensa con mayor claridad, por ello el buen humor siempre es aconsejable en momentos muy tensos.
Algo sorprendente es que el cerebro también entiende de género. Las investigaciones demuestran que el cerebro de hombres y mujeres son distintos. Esto explica que, en general, ellas sean más empáticas y ellos se orienten mejor en el espacio, de ahí su destreza para manejar o practicar videojuegos, por ejemplo.